Los diplomáticos dicen que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha programado una reunión de emergencia para el 4 de marzo después de un incendio en una central nuclear que las fuerzas rusas han incautado en el noreste de Ucrania que dejó a los expertos atómicos luchando por vigilar las fugas de radiación.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), la agencia nuclear de Ucrania y funcionarios nucleares de todo el mundo dijeron que no se había detectado ninguna fuga de la central nuclear de Zaporizhzhya después de que los socorristas finalmente apagaran el fuego que ardió fuera de control durante la noche después de un bombardeo cercano por parte de las fuerzas rusas invasoras.
Los funcionarios locales dijeron que las fuerzas rusas abrieron fuego cuando su columna se acercaba a Zaporizhzhya.
El incidente llevó a la ONU y a las autoridades atómicas internacionales a adoptar posturas de emergencia, y la oficina del primer ministro británico Boris Johnson dijo que solicitaría una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para discutir la situación.
«No se han registrado cambios en la situación de la radiación», dijo más tarde la Inspección Reguladora Nuclear Estatal de Ucrania (SNRIU).
VER: El personal de los sitios nucleares ucranianos, Zaporizhzhya y Chernóbil están retenidos por las fuerzas rusas y trabajan bajo el cañón de un cañón, según el ex jefe de la inspección nuclear de Ucrania.
La planta nuclear de Zaporizhzhya, a orillas de un embalse en el río Dniéper, es la más grande de Europa y genera más de una quinta parte de la electricidad doméstica de Ucrania.
El OIEA dijo que estaba poniendo su centro de incidentes y emergencias en modo de respuesta completa debido a la situación.
El Director General del OIEA, Raphael Grossi, dijo más tarde que un «proyectil» había golpeado un área que «no formaba parte del reactor» y describió la situación como «operaciones normales». Pero añadió que, «de hecho, esto no tiene nada normal».
Grossi elogió al personal ucraniano de la planta por su valentía y resistencia en «circunstancias muy difíciles».
Dijo que solo uno de los seis reactores estaba funcionando, con una capacidad de alrededor del 60 por ciento.
El vídeo de la noche a la mañana mostraba un edificio, supuestamente un centro de entrenamiento, ardiendo en Zaporizhzhya.
El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, afirmó, sin pruebas, que un «grupo de sabotaje» ucraniano había incendiado el edificio.
Pero el alcalde de Zaporizhzhya, Dmytro Orlov, dijo que las fuerzas rusas habían abierto fuego contra un puesto de control a pocos kilómetros de la central nuclear y civiles allí y que los bombardeos golpearon la zona durante al menos una hora. Dijo que la ciudad no tenía suministro de agua ni cortes de energía.
La administración regional de Zaporizhzhya dijo más tarde que las tropas rusas se habían apoderado de la planta y que «el personal operativo está monitoreando el estado de las unidades de poder».
Un protocolo de la Convención de Ginebra restringe los ataques militares contra instalaciones nucleares.
El presidente Volodymyr Zelenskiy pronunció un discurso en vídeo después de que comenzara el incendio, instando a los europeos a «por favor, despertar. Dile a tus políticos: las tropas rusas están disparando contra una central nuclear en Ucrania».
Zelenskiy habló con EE. UU. El presidente Joe Biden y el primer ministro británico Boris Johnson para ponerlos al día sobre la situación en Zaporizhzhya.
La oficina de Johnson dijo que «las acciones imprudentes del presidente [ruso] [Vladimir] Putin ahora podrían amenazar directamente la seguridad de toda Europa».
Con informes del Servicio Ucraniano de RFE/RL, AP y Reuters
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