Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado un sistema de simulación basado en agentes que puede calcular los niveles de estrés en el lugar de trabajo para diseñar las políticas más adecuadas. Los resultados muestran que la carga de trabajo es el factor más influyente en términos de condiciones ambientales o relaciones con otros trabajadores.
Mantener el nivel de estrés laboral en un valor adecuado es fundamental para beneficiar el interés y la motivación de los empleados y la productividad de la empresa. Sin embargo, lograr este objetivo no siempre es fácil, especialmente porque es difícil medir cosas intangibles como la presión.
Carga de trabajo, el factor más influyente
El trabajo publicado en el Journal of Computing Science es muy claro: en cuanto a las condiciones ambientales o las relaciones con otros trabajadores, la carga de trabajo es un factor que tiene un mayor impacto en los niveles de estrés de los trabajadores.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores de la UPM se propusieron definir un modelo de estrés que toma en cuenta las condiciones laborales y ambientales y calcula la ansiedad laboral y la productividad del trabajador; posteriormente, el modelo se implementará en un sistema de simulación basado en agentes, que es un modelo computacional que permite simular las acciones e interacciones de agentes autónomos (entidades individuales o colectivas) para determinar qué efectos producen en el conjunto del sistema.
El sistema de simulación puede analizar la presión y la productividad en el lugar de trabajo de acuerdo con diferentes políticas para ajustar la ansiedad laboral.
Los investigadores analizaron cuatro políticas diferentes de ajuste de la presión y, finalmente, validaron el modelo, primero mediante análisis de sensibilidad y luego aplicado al living lab.
«El sistema propuesto permite simular una oficina inteligente para analizar la evolución del estrés y la productividad de los trabajadores a lo largo del tiempo»
Carlos Ángel Iglesias (UPM).
Mejorar las condiciones ambientales no es suficiente
Para averiguar qué políticas son las más adecuadas para reducir los niveles de estrés de los trabajadores a un valor apropiado, los investigadores probaron cuatro tipos de políticas de acción:
Sin automatización (no existe un sistema de adaptación ni de registro para detectar el estado de los trabajadores o los parámetros ambientales); adaptación del entorno (automatización del control de las condiciones ambientales temperatura, humedad o ruido) garantizando que estén cerca de los valores óptimos; adaptación de la carga de trabajo (automatización de las tareas relacionadas con la carga de trabajo); y adaptación total (adaptación tanto de las condiciones ambientales como de la carga de trabajo).
Los resultados muestran que la adaptación a las condiciones ambientales por sí sola no puede regular eficazmente la ansiedad en el lugar de trabajo, pero combinada con la adaptación a la carga de trabajo, puede reducir el estrés en el lugar de trabajo en un 10%.
Para los investigadores, el principal valor del modelo propuesto es que permite a las empresas determinar las causas de los niveles de estrés de los trabajadores y evaluar diversas políticas regulatorias, mejorando así la productividad y la calidad de vida de los trabajadores.
Fuente: SINC, licencia Creative Commons BY 4.0
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